Han pasado cincuenta años desde que, en septiembre de 1975, se lanzó en el Reino Unido y en Estados Unidos el noveno álbum de Pink Floyd: Wish You Were Here. Syd Barret es el protagonista ausente de gran parte de las canciones: Shine On You Crazy Diamond. Syd [Roger Keith] fue el lider y fundador de Pink Floyd con su primer LP en 1967: The Piper at the Gates of Dawn.

Barret empezó a consumir LSD [Lucy in the Sky with Diamonds canción incluida en Sargent Pepper’s de los Beatles] pero sus alucinaciones hicieron imposible ensayar, tocar en directo o grabar.

Pink Floyd continuó, pero Barret quedó en la memoria emocional, especialmente rn las letras de Roger Waters y de David Gilmour que había entrado sustityéndole en 1968 como guitarrista [multiinstrumentista] y cantante. A Gilmour se le considera uno de los mejores guitarristas de toda la historia del rock: hay que escuchar su solo de guitarra en Confortably Numb para poder entenderlo.

Con ese recuerdo latente -pero con David Gilmour- se logran los mejores éxitos de Pink Floyd: Dark Side of the Moon, Wish You Were Here, Animals y The Wall.
Con Pink Floyd el mundo del rock empieza a familiarizarse con la expresión album conceptual y, también más tarde con opera rock. Con Wish You Were Here, Pink Floyd se olvida de la etapa psicodélica anterior para pasar al rock progresivo, que consiste en elaborar composiciones largas con partes instrumentales, utilización de sintetizadores superando la estructura tradicional de las canciones de rock hasta entonces. Roger Waters y David Gilmour son las voces principales en la mayoría de las canciones. Es un álbum conceptual por la conexión temática en las letras de las canciones: contra la industria musical, la ausencia, etc… Incluso la portada y contraportada sugieren estos conceptos.

Por curiosidad vale la pena recordar que el primer álbum conceptual fue -sin recurrir a la prehistoria- : Dust Bowl Ballads de Woody Guthrie (1940) para reflejar el sufrimiento de la Gran Depresión; In the Wee Small Hours de Frank Sinatra (1955) melancolía romántica completa; Bob Dylan con el primer LP doble de la historia del rock Blonde on Blonde (1966)[¡impresionante!] y por último lo que algunos críticos consideran como un LP auténticamente conceptual Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band de The Beatles (1967) al generar el grupo una segunda identidad como tal grupo con el fin de generar otro concepto de música.
También con Pink Floyd se reafirmó la expresión ópera rock, que ya se había utilizado con The Who (Tommy 1969). [Algunos críticos consideran a Elvis Presley con El rock de la cárcel (1957) como el iniciador de este género]. Otro aspecto a considerar es el hecho de que la mayoría de las operas rock con cierto éxito terminan trasladándose al cine. La opera rock cuenta una historia -en su origen también son álbumes conceptuales- que se va desarrollando con cambios en el escenario, recursos técnicos para la iluminación y todo lo que pueda sorprender y atraer. El espectador sigue el argumento que está siendo narrado a través de la letra de las canciones y del escenario: inicio, conflicto y desenlace con la emoción de la música. Al igual que sucede también con las representaciones de Ópera: la historia, la voz, la melodía y, especialmente, la presencialidad. Así llegó The Wall en 1979.

La unidad de la banda tuvo dificultades desde un principio. Roger Waters (bajista y vocalista) intentó reflejar en un disco sus fantasmas biográficos. Más tarde se suma el resto de la banda. Así lo resume Jero Piñeiro: La idea central del disco, resumiendo bastante, es una alegoría plasmada en un muro psicológico que separa a Pink (alter ego fictio de Waters) del resto del mundo y lo encierra en un claustrofóbico y fascista universo interior. Su desencantada visión de la sociedad sitúa a los seres humanos en un sistema que aliena y desdibuja al individuo desde la infancia (los profesores idiotizan a sus alumnos para convertirlos en “otro ladrillo más en el muro”), mientras que las madres sobreprotegen a sus niños como recuerda el propio Roger (Mother): siempre serás mi bebé. No todas las canciones son impresionantes pero hay algunas canciones absolutamente magistrales: Comfortably Numb, Another brick in the wall y especialmente In the flesh. Con motivo de las celebraciones por la caída del muro de Berlín( 1989) se representó The Wall junto a la Puerta de Brandenburgo (1990). Participaron grandes cantantes para celebrar el auténtico final de la segunda guerra mundial: Rick Danko, Levon Helm y Garth Hudson de The Band, The Hooters, Van Morrison, Sinéad O’Connor, Cyndi Lauper, Marianne Faithfull, Ute Lemper, Joni Mitchell, Paul Carrack, Thomas Dolby, Scorpions y Bryan Adams. Tuve el placer de ver la retansmisión que para tal evento realizó RTVE junto con más de 56 países. Tres cuestiones finales. Una negativa: la insoprotable omnipresencia de Roger Waters (el resto de la banda no intervino en el evento) con razón o sin ella. Otra muy positiva, el inolvidable recuerdo de la interpretación de In the flesh por el grupo alemán Scorpions. Pueden ver y oirla en el enlace.

En tercer lugar, es importante reseñar la deuda de Muse con Pink Floyd: ¿Cuándo fue la primera vez que escuchaste ‘The Dark Side Of The Moon’? Seguro que lo recuerdas. Pues el líder de Muse, Matt Bellamy, también. Así lo recordó en una entrevista con Total Guitar. En ella, el guitarrista y teclista contó la anécdota de cómo surgió la primera escucha del mítico disco de Pink Floyd. Y es que, aunque parezca mentira, fue el productor John Leckie quien les hizo escucharlo, al darse cuenta de que sus horizontes musicales debían expandirles. […] Bellamy también dice: “David Gilmour es un músico increíblemente expresivo y emocional. En cierto modo, te hace sentir que estás escuchando a un ser humano cantar. Toca con un grado de expresión que es muy, muy raro. No hay ningún truco técnico o alarde con él, a menos que sea por una razón emocional“. Los sintetizadores, lo conceptual, las letras de las canciones, la puesta en escena, pero con la creatividad del XXI confluyen en Muse: Time is Running Out (2003) en directo.Su último álbum es de 2022: Will of the People.

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